sábado, 14 de noviembre de 2015

General Julio Rodríguez ou o BOE = tío La Vara ( II)

     
        ¿No es digno de confianza  y pierde la idoneidad, un militar  con más de cuarenta años de servicio que ha  tenido el máximo rango jerárquico, General de Ejército,  que ha  sido el máximo mando militar de las Fuerzas Armadas  durante casi cuatro años, y que  por,  supuestamente,  haber infringido una norma  administrativa, cuando no representa ningún puesto orgánico funcional en las F.A.?

       ¿Se puede utilizar el BOE como  mensaje de  política partidaria?


       El que  fuera Jefe de Estado Mayor de la Defensa en su momento, el General Julio Rodríguez, hoy tiene sesenta y siete años, si fuese un ciudadano  más o un militar más  estaría jubilado  o retirado de su profesión, pasa de los sesenta y cinco años. Como retirado tendría los derechos políticos plenos y no estaría restringido en su derecho de participación política, manifestación, reunión y expresión por ser militar. 
      El estaba en la situación de reserva pero que a efectos de derechos constitucionales, disciplinarios y penales es equivalente a estar en activo. Aparte de su situación de Reserva era homologada a la de quien está en activo ya que tenía como destino ser  miembro de  la Asamblea de la Real y militar Orden de San Hermenegildo.  Este cargo  no  cumplía ninguna función  orgánica dentro de las Fuerzas Armadas, la política de Defensa etc.
      La ley 39/2007 que regula la carrera militar y sus situaciones, contempla que los Jefes de Estado Mayor de los tres Ejércitos  y  el Jefe de Estado Mayor de la Defensa una vez que  cesan en sus destinos continúan  en la situación de reserva ocupando algún puesto en organismos internacionales u otro cometido durante seis años, y si no ocupan ninguno de esos puestos pasarán a ser miembros de la citada Orden Militar durante ese tiempo. Esa era la situación del General. Es evidente que esta situación es voluntaria , si dicho Jefe  es cesado por el Gobierno puede pasar a esta situación o no, que normalmente aceptan porque les favorece y quieren seguir ligados durante ese tiempo a la institución. Es evidente que esa relación puede romperse en el momento que lo desee , exactamente  igual que cualquier militar o cualquier funcionario que   puede pedir la baja , o su pase a retiro si ha cumplido  para ello el tiempo de trabajo que marca la Ley.
  
      En este caso al General le faltaba un año y algo para cumplir los seis después de finalizar  su época de mando como Jemad.  Era miembro directivo de  una Institución que tiene unas funciones históricas y simbólicas como es la Asamblea de la Real y Militar Orden de San Hermenegildo cuya función es mantener  la tradición histórica y que con estilo medieval  en recuerdo de las ordenes de Caballería, la Orden de Santiago o la de Calatrava, que se mantienen en el  acervo histórico cultural de las fuerzas Armadas. Dicha Institución tiene actualmente como cometido  conceder la Orden y Placa de San Hermenegildo a todos los militares que al llevar veinte y veinticinco años de servicio, siempre y cuando  cumplan una serie de  condiciones, que el noventa y nueve por ciento cumplen. Pertenecía a esta  Institución como miembro nato por ser quien había sido en su más alto cometido  profesional. 

         El General como ha ocurrido con otros militares, pocos, decidió recuperar la plenitud de sus derechos políticos para ejercer como miembro activo de un partido político y  poder ser electo como diputado. Remitió   una carta al Ministro de Defensa, solicitando su pase a retiro, o sea no tener vinculación ninguna con las FA. El ministro le llamó por deferencia, supongo, y le preguntó sus motivos y el  le contestó que tenía motivos personales, evidentemente el Ministro sospechó que debían de tratarse de asunto político. La baja  solicitada   se demoró un cierto  tiempo. Todo eso según información  de prensa y  citas de comentarios públicos del General. 

       El ciudadano  Julio Rodriguez al haber solicitado el derecho  del que no se le puede privar de darse de Baja en las FA., y considerando que, aunque  no tuviese respuesta su solicitud era suficiente para  dejar de ser militar y poner fin a la prohibición de realizar manifestaciones públicas políticas, el hecho de haber cursado su petición .  Así pues hizo pública manifestación de apoyo y adherencia a un partido político comunicando a la vez que se presentaba en las listas del mismo para intentar ser electo diputado a las Cortes en las próximas elecciones. El partido político es Podemos. Como  él otras personas conocidas y de puestos importantes se han unido al proyecto de Podemos.  Es de destacar a la  Juez número dos del Consejo del Poder Judicial, o antes a las elecciones europeas el ya jubilado Fiscal Jimenez Villarejo, entre otros .

      Que un militar sea captado por un partido político, es bueno. Creo que la normalidad democrática debe abarcar a todo el ámbito de la sociedad, y  porque no utilizar los mejores recursos de la nación para aplicarlo en casos a la gestión política o a la política parlamentaria. Un militar es un ciudadano de uniforme, amigo de su compatriotas ciudadanos por los que juró dar su vida si fuese necesario para darles la seguridad que precisen a las órdenes del Gobierno. En las Fuerzas Armadas hay personas muy cualificadas en materias muy concretas que se han formado con el dinero del Estado y que  en muchos casos sería muy provechoso para la sociedad el utilizar experiencias y conocimientos de militares que se han formado durante años. Por otro lado la restricción  de derechos políticos de los militares es muy alta y se ha cuidado por parte de los partidos el evitar la participación política de cualquier militar, como herencia de la primera época constitucional y la transición. Todo ello por razones obvias.
      Es poco conocido el caso de militares retirados que estén dedicados a la política. O al menos no se han divulgado, casos muy raros y siempre con algún partido de  derechas. Si sabemos de Policías, jueces, fiscales que se han dedicado a la política. Por eso el caso del General Rodriguez ha sido tan llamativo y ha causado sorpresa y digamos que malestar en el Gobierno. Pero sin duda la sorpresa mayor, o la sorpresa en si mismo, es que haya decidido realizar tal participación en un partido  que para algunos lleva aparejados  adjetivos  poco agradables.

      Digamos que algunos han interpretado  este hecho  como si uno de los nuestros se ha pasado al enemigo. No hubiera pasado nada y se hubiese visto como una sana costumbre democrática su pase a retiro si se hubiese unido a algunos de los tres partidos considerados más "adaptados" a lo que algunos piensan debe "pensar un militar". Pero he aquí el delito, si todos somos demócratas,españoles,y queremos defender a nuestros ciudadanos porque debemos juzgar tan ideológica mente a un partido que   quiere gobernar el país con una concreta forma de política y que van a decidir los ciudadanos si le dejan o no hacerlo. El  hecho de  sumar para su equipo a un patriota, experto en temas de Defensa, que  comulga con los presupuestos de ese partido para gestionar lo público,  ¿porque sienta tan mal?.
 
      Tal vez, sin duda, porque se asocia al militar como servidor público pero determinado exclusivamente a valores coincidentes con partidos de derecha. Así como en Portugal , por ejemplo, por otras razones se puede ver a un militar con pensamientos unidos al Partido Socialista o Comunista  con más normalidad ,  en España por tradición militar y política es bien diferente  la concepción . Recordemos que en España un militar gobernó cuarenta años y en Portugal tuvieron de primer ministro en los primeros años del proceso revolucionario a  un  teniente coronel , Vasco Gonçalves,  que era comunista y estaba apoyado  por el partido comunista. El General Rodriguez
tuvo contactos con la UMD, según relató, ha sido siempre de ideas izquierdistas dicen quien lo conocía, eso si nunca se manifestó públicamente al respecto y fue siempre un militar correcto y disciplinado en ese sentido, recordemos que en su carrera militar alcanzó el empleo de Teniente General. Incluso cuando tomo posesión de su cargo no juró como es habitual sino que prometió su cargo, detalle que no se le escapó a ciertos ambientes de las Fuerzas Armadas, detalle  que para  alguien puede parecer sin importancia, la tiene  y mucho, y dice de las ideas y forma de mantenerlas de la persona que lo hace.

        Sin duda el  aporta confianza, prestigio y seriedad a un partido bisoño y que para algunos votantes desprenda dudas de su organización y seriedad en temas relacionados con la defensa. Y ahí encaja la respuesta al porque un Gobierno se enfada de tal manera a través de su Vicepresidenta que hace comentario público del cese de un general de prestigio añadiendo que se hacía por falta de confianza y falta de idoneidad. El cargo que representaba, simbólico en realidad, ni era de confianza ni precisaba una especial idoneidad. El utilizar el BOE contra el adversario político es triste y pobre. Sin duda fue un mensaje a su electorado, a personas que no entienden la postura del General, pero eso en si mismo  es muy grave, pues quién presume de que se respeten las instituciones y el estado de derecho no puede utilizar el BOE  para dar mensajes políticos.

          Que bien hubiese quedado todo, solo con publicar el cese de quién lo había solicitado, y de hacer comentarios de la persona limitarse a agradecer sus servicios prestados ya que había sido el jefe superior institucional de las Fuerzas Armadas. Ya se encargarán los ciudadanos de juzgar la postura  del General y el de explicar la suya. Lo otro parece más una pataleta con poca clase.

        Por cierto ha habido casos de Jefes de Estado Mayor que si han causado baja pero para pasar a ocupar puestos  directivos en empresas  de armamento o  seguridad o relacionadas con la Defensa.     
       
        Dejaron sus cargos y ocuparon puestos directivos en empresas de  Seguridad y Defensa  antiguos Jefes de Estado Mayor.

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